Por Carolina Gatica, Especialista infantil y maternidad de All Nutrition
La lactancia es un proceso desafiante que permite una conexión única con los hijos. A través de ella, se proporcionan los nutrientes necesarios para que el bebé viva sus primeros meses de vida, incluyendo proteínas, grasas, vitaminas y minerales. La leche materna es vital para el ciclo del recién nacido, ya que es rica en anticuerpos y otros compuestos que ayudan a protegerlo de infecciones y enfermedades, especialmente en los primeros meses de vida, ya que su sistema inmunológico aún está en desarrollo.
En el mes de la lactancia, es importante destacar que ésta no está exenta de complicaciones: alergias alimentarias u otras patologías pueden generar cambios en la alimentación de las madres, quienes pueden tener dificultades para obtener los nutrientes necesarios. Aquí los suplementos juegan un papel fundamental. Por ejemplo, el calcio, el hierro y algunas vitaminas, como la D y la B12, son esenciales, ya que en algunos casos puede ser recomendable tomar suplementos para cubrir deficiencias. No obstante, es fundamental que cualquier madre que piense en tomar suplementos, consulte primero con su médico o un especialista en nutrición. De esta manera, podrá asegurarse de elegir la opción más adecuada para sus necesidades y las de su bebé, garantizando así el bienestar de ambos.
Sin duda, uno de los mayores desafíos que puede enfrentar una madre es la falta de producción de leche materna. Esta situación puede generar sentimientos de angustia, tristeza y ansiedad, afectando negativamente la salud mental. Cabe destacar que, según datos de UNICEF, 4 de cada 10 menores de 6 meses son amamantados exclusivamente, en América Latina y el Caribe, cifra que es baja y se da por distintos motivos, entre ellos la afectación de la salud mental de la madre. Por esta razón, es prioritario desarrollar políticas públicas que apoyen a las madres y su salud, evitando problemas en el organismo desde una edad temprana.
De forma paralela, puedo mencionar que existen diversas estrategias para lograr una lactancia menos conflictiva, como revisar la técnica de amamantamiento, aumentar la frecuencia de las tomas y considerar el uso de un extractor, terapias holísticas, entre otras. Si después de intentar estas acciones aún tienes dificultades, habla con tu pediatra sobre la posibilidad de usar fórmula infantil como complemento mientras trabajas en aumentar tu producción. También es importante contar con el apoyo de un profesional para asegurar una nutrición adecuada, lo cual puedes hacer de manera gratuita en plataformas como All Nutrition que cuenta con asesoría experta y gratuita.
La lactancia sin duda puede ser un desafío, y es importante recordar que cada madre y cada bebé son diferentes, y que prácticas como esta genera una conexión y un vínculo esencial para el ciclo vital de un recién nacido, que beneficia y promueve el bienestar de las familias y de la sociedad en general.