- Por: María Inés Albornoz, gerente comercial y de marketing de Solunion Chile
Septiembre se instala cada año como uno de los meses de mayor movimiento comercial en Chile. Las Fiestas Patrias no solo representan tradición y cultura, sino que también actúan como un motor clave para la economía.
En 2025, este impulso se da en un escenario de recuperación: el Banco Central proyecta un crecimiento del PIB entre 2% y 2,75%, mientras que el último Imacec mostró un alza anual superior al 3%, reflejo de una economía más activa.
Las Fiestas Patrias y el cambio de estación generan un dinamismo único en el consumo: supermercados, carnicerías, botillerías, retail y el sector Horeca registran incrementos en ventas que pueden llegar al 30% e incluso al 60% respecto a meses anteriores.
Además del consumo asociado a la celebración, la primavera impulsa compras vinculadas a la renovación del hogar, vestuario y actividades al aire libre. Esto significa que septiembre no solo es relevante para los supermercados y comercios que venden directamente al cliente final, sino también para todas las empresas proveedoras que los abastecen. Para muchas de ellas, este mes representa su mejor período del año, ya que el alza en la demanda de productos de consumo masivo se traslada a toda la cadena de valor.
Pero junto con las oportunidades, también aparecen riesgos que pueden comprometer la liquidez y estabilidad financiera del negocio.
Un dinamismo que también implica riesgos
Si bien este escenario trae oportunidades, también supone riesgos importantes para las empresas que venden a crédito. La realidad es que solo un 0,6% de las compañías en Chile utiliza pólizas de seguro de crédito, lo que demuestra que la cobertura aún es baja.
En otras palabras, la mayoría de las ventas en septiembre —precisamente en el momento de mayor dinamismo y exposición— se realizan sin ningún tipo de protección frente al impago. Cuando un cliente no cumple, las compañías deben absorber por completo el golpe financiero, algo que puede ser crítico para negocios que dependen de la liquidez inmediata.
La importancia de proteger las ventas
El consumo asociado a las Fiestas Patrias ha mostrado resiliencia incluso en contextos económicos complejos. Sin embargo, el riesgo de impago no desaparece con el crecimiento del PIB ni con las buenas cifras de consumo; al contrario, puede aumentar en la medida en que se multiplican las transacciones y los montos involucrados.
Por eso, más allá de vender más en este mes, la clave está en vender con respaldo. El seguro de crédito permite proteger las cuentas por cobrar, resguardar la caja y planificar con mayor seguridad el futuro del negocio.
En tiempos de crecimiento, la mejor forma de consolidar ese impulso no es solo aprovechar el alza del consumo, sino hacerlo de manera segura y con protección.
