- Hugo Gutiérrez ha trasgredido todo límite. Ha promovido la violencia de una manera contumaz que no se condice con la responsabilidad de su cargo”, aseveraron los legisladores.
Hasta el Tribunal Constitucional arribó un grupo de parlamentarios de Chile Vamos, integrado por María José Hoffmann, Jorge Alessandri y Álvaro Carter de la UDI; además de Sebastián Torrealba, Luis Pardo y Harry Jürgensen de RN. ¿El motivo? presentar un requerimiento a través del cual se solicita la destitución del diputado del Partido Comunista, Hugo Gutiérrez, por promover la violencia e incitar al desorden público.
A juicio de los diputados, Hugo Gutiérrez ha incurrido de manera constante y sistemática en conductas y declaraciones de este tipo; sin embargo, la situación alcanzó ribetes “inaceptables”, luego que el legislador comunista publicara en sus redes sociales una serie de imágenes supuestamente realizadas por niños con un claro mensaje de odio y violencia.
En esa línea, la Jefa de Bancada de la UDI, María José Hoffmann, manifestó que “sus actitudes, sus acciones (de Gutiérrez), durante estos últimos meses son absolutamente reprochables e impresentables, promoviendo la violencia de una manera contumaz que no se condice con la responsabilidad de su cargo. Hacemos esta presentación para pedir su destitución, pues no es aceptable que en nuestro país la violencia se instale de esta manera. Lo que está haciendo el diputado Gutiérrez, al menos en los últimos hechos, cuando obliga y usa a niños, nos parece que es gravísimo. Ha trasgredido todos los límites con una violencia que no vamos a permitir”.
Complementando lo anterior, Jorge Alessandri recalcó que “el cargo de diputado o senador viene con una serie de derechos y una serie de deberes. Con los derechos el diputado Gutiérrez se siente muy cómodo, cobra el sueldo todos los meses, asiste a las sesiones, legisla y almuerza en Valparaíso, pero al parecer no está muy cómodo con los deberes del cargo, que es respetar el orden público, las instituciones, no incitar al desorden, al odio ni a la violencia, y ha caído justamente en esta causal”.
Por su parte, Álvaro Carter enfatizó que “hemos venido al Tribunal Constitucional porque creemos que en la vida y en la política todo tiene un límite y el diputado Gutiérrez lo ha traspasado completamente. Tenemos que buscar la forma -entre el mundo político y el mundo social- de que Chile puede avanzar. Nosotros queremos la paz, nosotros queremos avanzar, y este recurso va en este camino”.
Desde Renovación Nacional, Harry Jürgensen sostuvo que “Hugo Gutiérrez es un fiel representante de la izquierda radical que no quiere la paz, que pretende instalar el caos en nuestro país, que quiere instalar que en este país reine la violencia. Es un agitador más, que sistemáticamente incita al odio y a la violencia y a desobedecer el orden público”.
En ese sentido, el diputado Luis Pardo profundizó en torno a los argumentos tras la decisión de presentar el requerimiento al Tribunal Constitucional, señalando que “la Constitución prohíbe que los parlamentarios tengan este tipo de actitudes. Se prohíbe expresamente que llamemos -por ejemplo- a vulnerar el orden establecido, que incitemos al orden público, que validemos actitudes contrarias a nuestro estado de Derecho y el diputado Gutiérrez, que no es el único, ha superado todos los límites y que de acuerdo a nuestra apreciación jurídica se reúnen todas las condiciones para que el Tribunal Constitucional lo destituya”.
Finalmente, Sebastián Torrealba subrayó que “nosotros estamos por la paz, los acuerdos y el diálogo y no aceptaremos la violencia, menos cuando se incita a través de personas inocentes”, haciendo referencia al episodio de los dibujos, agregando además que “tenemos plena confianza tanto política, como jurídica, que este requerimiento va a prosperar, porque este parlamentario comunista ha traspasado todos los niveles de violencia usando a niños para trasmitir sus mensajes de odio”.
“Esperamos que esta vez el TC tenga el coraje para aplicar justicia y que al menos acoja el requerimiento que estamos presentando. Las pruebas son evidentes, porque para aplicar el máximo rigor de la justicia no sólo se debe actuar en Derecho, también se debe tener coraje”, finalizaron los parlamentarios.
